lunes, 20 de julio de 2015

La otra cara.

Se ponía su mejor vestido, se maquillaba como si tuviera veinte y se ponía sus tacones altos para aparentar algo. Algo que no era. Solo era una más del resto. Alguien creado por la estúpida y demandante sociedad. Plástica. 

Agarra su bolso y textea en su celular. Sus amigas ya están listas para salir y tener una noche para ellas solas. Ella no se sentía del todo bien, ella todavía era alguien insegura.

Se echa un vistazo en el espejo, se acomoda el vestido, se alborota el cabello, se retoca el lápiz labial color vino, toma su bolso y se va.

Llega a la fiesta, y automáticamente sus amigas comienzan a bailar, a frotar sus cuerpos mutuamente. Ella, por otro lado, toma. Entre trago y trago se siente lista. Se siente viva. Se siente otra persona. Siente que puede tomar el control de todo. Siente que tiene una máscara que le permite hacer cualquier cosa, lo que desee, lo más salvaje.

Sale a la pista y comienza a bailar, a menear sus caderas seductoramente como si fuera una bailarina profesional. Alguien, un chico, le guiña el ojo y ella corresponde con una sonrisa. Este se le acerca y la toma de la cintura, entonces es ahí cuando comienza a bailar.

Algo en ella todavía sigue despierto. Esta consiente de lo que hace.

Comienza a preguntarse ¿por qué lo hace?, si no le gusta. ¿Será porque quiere encajar en esta sociedad?. ¿Será por qué le gusta la manera en la que alguien se fija en ella?. O simplemente porque está harta de que los demás la vean como la aburrida y sin misterio.

Cuando ella sale se transforma en otra persona, alguien que no le tiene miedo al “qué dirán”, alguien que quiere divertirse y sentir la adrenalina.

Siente como la situación se le va yendo de las manos. Ahora no solo bailan, si no que también se besan. Comienza a sentir su lápiz labial corriéndose. Se siente sucia por un momento. No es ella. Entonces se lo quita de encima y sale afuera. Casi corriendo. Casi huyendo.


Le toma un tiempo re incorporarse, pero lo hace. Toma aire y se acomoda su largo cabello en un rodete alto. Se limpia la boca y comienza a caminar. Caminar sin rumbo. No esta segura de lo que hace, pero sigue su camino. Ahora ya no tiene esa mascara. Es ella, en su estado más puro.  

                     ✨

                                 "Esta frío a fuera para que los ángeles vuelen"

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